El ser humano siempre ha deseado hacer lo que le da la gana, pero ¿es eso posible o nuestro destino está escrito y no podemos cambiarlo?
Luis ironiza sobre el horóscopo, que es la prueba incontestable de que nuestro destino está escrito en las estrellas, y sobre las autocaravanas, que es la prueba de que está escrito en los mapas de carreteras.
En este monólogo Piedrahita arremete con la furia destructiva de un cachorro contra temas como las anguilas eléctricas, el vello púbico, la leche de soja, la lluvia o la libertad de expresión.